¿Por qué mi perro no come?

humonia / Getty Images
Los perros suelen estar muy motivados por la comida, así que si el tuyo deja de comer, es natural preocuparse un poco. Existen diversas causas, algunas más graves que otras. La anorexia, por ejemplo, es una falta total de apetito. Tu perro rechaza cualquier alimento y no come nada. La hiporexia, por el contrario, es una disminución del apetito o una reticencia a querer comer. Es importante tener en cuenta la diferencia al hablar de la gravedad de los síntomas de tu mascota con tu veterinario, ya que diferentes problemas causarán distintos niveles de cambios en el apetito. Se suele asociar el término anorexia con la anorexia nerviosa, que es un trastorno alimentario en humanos, pero la anorexia simplemente ocurre cuando un perro se niega a comer. Como dueño de una mascota, es importante comprender por qué un perro ha dejado de comer, si debes obligarlo a comer y cómo hacerlo, y cuándo debes preocuparte.
¿Por qué los perros dejan de comer?
Hay varias razones por las que un perro puede negarse a comer. Algunas pueden deberse al comportamiento, pero otras, más graves, pueden deberse a una enfermedad o problema del perro
Conductual
Algunos perros se vuelven quisquillosos para comer después de ser consentidos por dueños bienintencionados y se niegan a comer a menos que consigan lo que quieren. Los cambios regulares en la comida, muchas golosinas y el consentirlos con comida de mesa pueden causar problemas de comportamiento que pueden derivar en anorexia.
Enfermedad
Cuando un perro no se siente bien, debido a una enfermedad, puede no querer comer. Enfermedades hepáticas y renales, enfermedades o bloqueos intestinales, enfermedades respiratorias que causan problemas respiratorios, cáncer y otros problemas pueden hacer que un perro deje de comer. El letargo y otros síntomas, como vómitos y diarrea, también suelen presentarse junto con la anorexia en un perro enfermo.
Dolor
Cualquier tipo de dolor en las articulaciones, músculos o espalda, dolor en la boca, malestar abdominal y otros problemas pueden causar suficiente incomodidad como para que un perro se muestre reacio a inclinar la cabeza y comer.
Problemas dentales
Los problemas dentales , incluidos dientes rotos, enfermedad periodontal e incluso un palo atrapado en el paladar de un perro pueden provocar anorexia en su perro.
Cambios ambientales
Si su perro está estresado o temeroso (debido a un nuevo cachorro o persona en el hogar, un nuevo entorno o debido a la construcción de la casa y otros cambios en el hogar) puede negarse a comer.
Efectos secundarios
Los medicamentos que su perro esté tomando pueden provocar que no quiera comer. Consulte con su veterinario para ver si se puede modificar la dosis o si se puede hacer algo para disminuir los efectos secundarios. Además de los medicamentos, las vacunas recientes también pueden provocar que un perro se sienta mal y, por lo tanto, no quiera comer.
Obstrucción
Algunos perros comen cosas como calcetines , peluches, piedras y otros objetos indigeribles. Esto puede causar una obstrucción y hacer que su perro no quiera comer
Qué hacer si tu perro no come
No debe forzar a su perro a comer. Si está perdiendo peso, su veterinario podría indicarle que le proporcione alimentación asistida. Se puede usar comida enlatada diluida o fórmulas especiales para inyectar la comida en la boca del perro, pero debe hacerse lentamente. Si se fuerza la alimentación demasiado rápido o si su perro se niega a tragar la comida, podría aspirarla, lo que provocaría que la comida se vaya a las vías respiratorias en lugar del esófago. No se recomienda intentar forzar la alimentación de su perro sin las instrucciones y directrices específicas de su veterinario. Dado que existen otras maneras más seguras y efectivas de abrir el apetito de su perro, rara vez se recomienda la alimentación forzada.
Lo más seguro si le preocupa la salud o el comportamiento de su mascota es contactar a su veterinario. Él podrá orientarle sobre qué buscar y cuándo preocuparse. Conocerá el historial de su mascota y podría ofrecerle consejos o alimentos que le ayuden a comer más rápido.
Si su perro se niega a comer, pero por lo demás se comporta con normalidad, puede seguir ofreciéndole comida y vigilarlo para detectar cualquier cambio durante 12 a 24 horas. Si la anorexia persiste, si su perro empieza a perder peso, no se comporta con normalidad, vomita, tiene diarrea o si nota cualquier otro cambio, contacte a su veterinario de inmediato. Comparta con su veterinario cualquier alimento o golosina que su perro haya estado comiendo y cuándo notó los primeros cambios en el apetito. Además de un examen físico, es posible que sea necesario realizar radiografías, análisis de sangre y otras pruebas para determinar la causa de la anorexia de su perro.
Tratamiento y prevención
Si tu perro no come, hay algunas cosas que puedes hacer para intentar incitarlo a comer en casa.
- Llame a su veterinario para ver si tiene consejos o le puede recomendar un alimento seguro para su perro. Siempre es recomendable llamar a su veterinario antes de darle algo nuevo a su mascota.
- Calienta la comida de tu perro durante unos segundos en el microondas y comprueba siempre la temperatura para asegurarte de que no le queme la boca antes de ofrecérsela.
- Ofrézcale papilla, probando primero las opciones simples de pavo o pollo. Asegúrese de no añadir condimentos ni otros alimentos.
- Alimente con una dieta blanda de arroz blanco cocido y pechuga de pollo hervida, deshuesada y sin piel, que no esté sazonada.
- Mezcle caldo de pollo sin sodio o agua en la comida de su perro.
- Coloque la comida de su perro en un plato del que comería una persona.
- Coloque la comida de su perro en el suelo en lugar de en un recipiente para perros o considere levantarla si el dolor de cuello o espalda es un problema.
- Espolvoree una pequeña cantidad de mozzarella baja en grasa o un poco de mantequilla de maní sobre la comida.
Algunas opciones pueden ser más efectivas para su perro, y su eficacia podría depender de la causa de su anorexia. Los alimentos blandos pueden ser más atractivos para un perro con problemas dentales; la comida caliente puede ser más atractiva para un perro con problemas de olfato debido a problemas respiratorios; y aditivos como el pollo enlatado o el caldo de pollo pueden ayudar a un perro quisquilloso con la comida.
En cuanto a la prevención, es importante tener en cuenta que muchos perros con tendencia a comer de forma selectiva suelen sufrir inflamación gastrointestinal crónica de bajo grado. Esto significa que podrían beneficiarse de una dieta para estómagos sensibles. Consulte con su veterinario sobre los hábitos alimenticios de su perro para que le recomiende una dieta que le ayude a comer con más regularidad sin añadir ingredientes ni alimento extra. Estos ingredientes adicionales pueden añadir muchas calorías adicionales, lo que puede provocar obesidad o causar más molestias gastrointestinales si se consumen con frecuencia.
Mantenga la salud dental de su perro y evite ofrecerle golosinas o alimentos en exceso para evitar que su cachorro se vuelva quisquilloso para comer.