Colapso traqueal en perros

El colapso traqueal es una enfermedad crónica que afecta la tráquea y las vías respiratorias inferiores. Esta enfermedad es progresiva, lo que significa que empeora con el tiempo. Aunque el colapso traqueal es irreversible, existen tratamientos para mejorar los síntomas.

¿Qué es el colapso traqueal?

La tráquea es una parte importante de las vías respiratorias superiores. Es una estructura flexible en forma de tubo, rodeada de anillos de cartílago en forma de U, lo que le da una apariencia similar a la de un acordeón. Los anillos están unidos a una membrana y ayudan a mantener la tráquea abierta, permitiendo que el perro respire con normalidad. Si estos anillos de cartílago se debilitan o desgastan, es posible que ya no puedan mantener la tráquea abierta. Se aplanan y colapsan, reduciendo el espacio por el que pasa el aire. Esta afección puede o no implicar también el colapso de las vías respiratorias inferiores, donde se ramifican conductos más pequeños para transportar el aire a los pulmones.

Factores de riesgo de colapso traqueal

Las razas de perros pequeños son las más comúnmente afectadas por el colapso traqueal, especialmente los pomeranos , caniches, yorkshire terriers y chihuahuas . El colapso traqueal puede ser hereditario o no. Puede ser congénito (presente al nacer) o adquirido (desarrollado posteriormente, a veces secundario a otras enfermedades). Los perros con sobrepeso u obesidad tienen un mayor riesgo de desarrollar colapso traqueal. La exposición al humo del cigarrillo u otra contaminación atmosférica puede agravar el colapso traqueal al irritar la garganta y provocar tos.

Signos de colapso traqueal en perros

La tos es, con mucho, el signo más común de colapso traqueal en perros. Los perros con colapso traqueal a menudo experimentan los siguientes signos:

• Una tos áspera, seca e improductiva (que a menudo suena como el graznido de un ganso)
• Tos al ejercer presión sobre el cuello (especialmente con un collar o las manos)
• Tos y/o sibilancias cuando se está excitado
• Tos al ser recogido
• Arcadas (parece que quiere vomitar, pero no produce nada)
• Ruido al respirar (sibilancias, etc.)
• Dificultad para respirar (mayor esfuerzo)
• Intolerancia al ejercicio
• Encías de color azul (a menudo en conjunción con el ejercicio o la excitación)
• Episodios de desmayo/pérdida de conciencia

Asegúrese de informar a su veterinario sobre estos y cualquier otro signo de enfermedad,  ya que algunos de estos signos también pueden presentarse con otras afecciones, por lo que debería consultar con su veterinario para que realice el diagnóstico. Es mejor actuar a tiempo para que su perro pueda aliviarse.

Cómo diagnostican los veterinarios el colapso traqueal en perros

Si sospecha que su perro tiene un colapso traqueal, asegúrese de visitar a un veterinario para una evaluación. Su veterinario comenzará haciéndole varias preguntas para obtener información sobre su perro y los signos que ha observado.

A continuación, su veterinario le realizará un examen físico a su perro. Es posible que intente provocarle la tos presionando ligeramente la tráquea. Esto no determina la enfermedad, pero puede darle una idea del tipo de tos que presenta su perro. Además, puede ser útil mostrarle un video de su perro tosiendo, con sibilancias o presentando otros síntomas.

Es muy probable que su veterinario recomiende radiografías de tórax para determinar el diagnóstico. Esto proporcionará una vista radiográfica de las vías respiratorias, el corazón y los pulmones de su perro. Tenga en cuenta que el colapso traqueal puede no aparecer en las radiografías, especialmente en casos leves, ya que la vía respiratoria solo está colapsada algunas veces y la radiografía puede capturarlo cuando está abierta. Las radiografías incluso pueden revelar una causa completamente diferente de los síntomas de su perro. Por eso, es importante tomar radiografías como primer paso.

Es muy probable que su veterinario quiera realizar análisis de laboratorio para evaluar mejor el estado general de salud de su perro. Análisis como la química sanguínea, el hemograma completo y el análisis de orina pueden revelar afecciones subyacentes. Estas afecciones pueden contribuir al colapso traqueal o no estar relacionadas. Los resultados de laboratorio pueden indicar otra afección que esté causando los síntomas de su perro.

Si su mascota necesita pruebas diagnósticas avanzadas, es posible que su veterinario local no cuente con el equipo necesario y lo derive a un especialista (normalmente un internista veterinario o un radiólogo intervencionista). El especialista veterinario podría recomendar una o más pruebas avanzadas.

• Broncoscopia, durante la cual se inserta una cámara de fibra óptica en forma de tubo en la tráquea, lo que permite al veterinario ver el interior de la tráquea y tomar muestras de líquido para cultivo y análisis (todo con su perro bajo anestesia).
• Ecocardiograma, que es una ecografía del corazón que evalúa la función cardíaca.
• Fluoroscopia, que es una radiografía en movimiento que muestra lo que ocurre cuando el perro inhala y exhala.

Con base en el resultado de las pruebas, su veterinario probablemente podrá hacer un diagnóstico. El siguiente paso es iniciar el tratamiento.

Tratamientos médicos para el colapso traqueal

El colapso traqueal no se puede curar, pero hay varias formas de ayudar a su perro.

Primero, asegúrese de dejar de usar collares de cuello en su perro. Cambie a un arnés que no ejerza presión sobre la zona del cuello. Bajar de peso es importante si su perro tiene sobrepeso, ya que el exceso de peso afecta negativamente las vías respiratorias.

Existen varios medicamentos que pueden ayudar a aliviar los síntomas del colapso traqueal. Los supresores de la tos, como la hidrocodona, son los más comúnmente recetados. También se pueden recetar sedantes para reducir la ansiedad y mantener al perro tranquilo y relajado. Esto reducirá la probabilidad de que su perro tosa o sufra espasmos traqueales.

Los perros con colapso traqueal pueden sufrir una crisis en la que sus síntomas se agravan. Esto puede deberse a diversas causas, como episodios de mucho estrés o excitación, infecciones respiratorias u otras enfermedades, especialmente con el calor. Si su perro tiene dificultad para respirar, presenta encías azuladas o tose excesivamente, consulte a su veterinario de inmediato. A menudo necesitan cuidados adicionales para superar estos episodios y recuperar una condición más estable.

Asegúrese de no usar ningún medicamento de venta libre a menos que su veterinario se lo recomiende específicamente. Use todos los medicamentos según las instrucciones de su veterinario y no cambie las dosis sin consultarlo. Evite los llamados “remedios caseros” o “remedios naturales” a menos que su veterinario le indique que son seguros. Desafortunadamente, algunos de estos pueden empeorar la situación.

Cirugía para el colapso de la tráquea

El tratamiento médico es eficaz en la mayoría de los perros. Sin embargo, en casos graves, la cirugía podría ser una opción a considerar. El tratamiento quirúrgico del colapso traqueal es un procedimiento mayor que debe ser realizado por un cirujano veterinario, idealmente uno certificado por la ACVS .

La cirugía puede implicar la colocación de anillos plásticos especiales alrededor de la tráquea para mantenerla abierta. O bien, el cirujano podría necesitar colocar un stent dentro de la tráquea o la vía aérea inferior. El stent es un dispositivo de malla que mantiene abierta la vía aérea. En algunos casos, un internista veterinario (idealmente, un internista certificado por el ACVIM) puede colocar el stent mediante traqueobroncoscopia.

Existen varios riesgos graves asociados con ambos procedimientos. En algunos casos, el stent o los anillos de plástico pueden romperse o desplazarse. También existen posibles complicaciones que pueden dañar la tráquea y las estructuras circundantes. Se requiere hospitalización postoperatoria. El tratamiento médico suele continuar durante el período de recuperación para disminuir el dolor, la inflamación, la tos y la excitación. Muchos de estos pacientes seguirán necesitando medicamentos para controlar sus síntomas hasta cierto punto, incluso si la cirugía es exitosa.

Como en la mayoría de los procedimientos quirúrgicos, la actividad del perro debe restringirse durante el período de recuperación y serán necesarias visitas de seguimiento con el veterinario o especialista. Tras la recuperación, muchos perros seguirán presentando síntomas, especialmente tos. Afortunadamente, estos síntomas suelen ser mucho más leves, pero aún podrían requerir medicación.

La buena noticia es que, con el cuidado y el control adecuados, la mayoría de los perros pueden llevar una vida relativamente normal a pesar del colapso traqueal. Como siempre, asegúrese de comunicarse con su veterinario, hacer preguntas y brindarle actualizaciones sobre la condición de su perro.