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Un alimento básico en las barbacoas y en los tailgates de todo Estados Unidos son los perritos calientes. Con la variedad de aderezos y sabores disponibles en la actualidad, no es de extrañar que sean tan populares. Entonces, ¿qué hacer con ese adorable cachorrito que está debajo de la mesa rogando por tu perrito caliente cuidadosamente preparado? ¿Seguro que un solo mordisco no te vendría mal? Sin embargo, no seas tan despreocupado a la hora de compartir tu plato. Los perritos calientes no son tan seguros para tu cachorro como puedes creer inicialmente.
Históricamente, los hot dogs se han elaborado con los cortes de carne “menos deseables” que se han molido y se han embutido en tripas de salchicha. Las variedades más económicas tienden a estar más procesadas, con más conservantes, y la mayoría de los hot dogs y salchichas, independientemente de su precio, tienden a tener un mayor contenido de grasa que otras proteínas de carne. Con todos los conservantes y la grasa, ya está empezando a sonar como una opción no tan saludable para una fiesta de este tipo.
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Los peligros de los hot dogs para tu perro
Los alimentos grasos para humanos pueden provocar pancreatitis aguda en los perros, una dolorosa enfermedad gastrointestinal que puede provocar vómitos, falta de apetito y letargo. Algunos perros pueden tener un sistema gastrointestinal más sensible que otros y, por lo tanto, pueden ser más sensibles a estas altas concentraciones de grasa, pero incluso los perros con los estómagos más fuertes pueden sufrir pancreatitis por comer un hot dog.
Los conservantes de los perritos calientes también suponen un problema de salud. En el pasado, se añadía nitrito de sodio como conservante a diversos productos de carne y pescado. Ayuda a prevenir el desarrollo del botulismo y da a los alimentos un color rosa que puede hacer que la comida sea más apetitosa a la vista. El nitrito de sodio de los perritos calientes no solo es un problema para tu propia salud. También puede provocar cáncer y otros problemas médicos en tu perro. Algunos fabricantes de perritos calientes pueden tener perritos calientes “sin nitritos” que utilizan apio en polvo en lugar de nitrito de sodio. Desafortunadamente, el nitrato de sodio del apio en polvo, que es diferente del nitrito de sodio y la razón de la sustitución de ingredientes, se puede convertir fácilmente en nitrito de sodio en el cuerpo. Por lo tanto, una empresa que utiliza apio en polvo para hacer que sus perritos calientes sin nitritos sean “más saludables” no es todo lo que el fabricante quiere hacerte creer.
¿Son mejores los hot dogs de lujo?
¿Y qué pasa si te quedas con los hot dogs artesanales tradicionales? ¿Seguro que las salchichas bajas en grasas y sin nitritos son adecuadas para tu cachorro? No te apresures. Por lo general, estos hot dogs especiales vienen en varios sabores sabrosos que son deliciosos para nosotros, pero no más seguros que un hot dog más barato. Los fabricantes pueden usar varias especias en sus recetas que, en sí mismas, representan un riesgo para la salud de tu perro. El ajo y la cebolla, algo bastante común en la cocina salada y en los hot dogs y salchichas, son tóxicos para los perros. Si tu perro llegara a poner su boca en algo cocinado con cualquiera de estos, podría comenzar a mostrar signos de anemia.
Aunque no lo creas, el mayor riesgo para la salud que presentan los hot dogs no es su alto contenido de grasa ni las especias tóxicas, sino su contenido de sal. ¡Los hot dogs son increíblemente salados! ¡El hot dog promedio tiene 500 mg de sodio solamente! Según el Consejo Nacional de Recursos, una división de la Academia Nacional de Ciencias, un perro de 33 libras (15 kg) solo necesita 200 mg de sodio al día. Por lo tanto, incluso si ese perro de 33 libras comiera solo la mitad de un hot dog, ya habría agotado su sodio diario. Ten en cuenta que los perros ya obtienen sodio en su comida para perros. Al igual que en las personas, la ingesta prolongada y excesiva de sodio puede provocar deshidratación y presión arterial alta en tu perro.
Alternativas más saludables
Si realmente quieres agasajar a tu cachorro durante una barbacoa en el jardín o una fiesta en el portón trasero en otoño, no le des salchichas. En su lugar, quédate con carne de res o pollo sin condimentar. Aunque tu cachorro realmente quiera esa salchicha, si supiera de qué lo estás protegiendo, te agradecería que lo cuides.