Comprar comederos y bebederos para tu gato no es tan solo cuestión de elegir el modelo más bonito o el tamaño adecuado. A continuación, te presentamos algunas consideraciones importantes que debes tener en cuenta antes de tomar una decisión.
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Cuencos de plástico
Aunque los cuencos de plástico suelen ser resistentes, tienen un par de desventajas. En primer lugar, muchos gatos son alérgicos al plástico y desarrollan una afección cutánea en el mentón que se parece al acné . En segundo lugar, el plástico tiende a rasparse y rayarse, y esas pequeñas fisuras se convierten en un caldo de cultivo para los gérmenes. Es mejor evitar el plástico en la medida de lo posible.
Los materiales más seguros para los comederos para gatos
El acero inoxidable es irrompible, resistente, apto para lavavajillas e inofensivo para los gatos. La mayoría de los veterinarios lo recomiendan (junto con los cuencos de cerámica). Otra buena opción es la cerámica, siempre que utilice un esmalte sin plomo (hoy en día, la mayoría lo hace).
Mantenlos limpios
A los gatos no les gusta comer ni beber de platos y cuencos sucios. Incluso la comida seca tiene suficiente humedad y grasa como para dejar una película en el plato. Intente enjuagar los cuencos de comida seca a diario y lávelos en el lavavajillas al menos cada pocos días. Los cuencos que se utilizan para comida enlatada deben lavarse en el lavavajillas a diario.
Tamaño y forma
Los mejores cuencos para gatos suelen ser lo suficientemente grandes como para contener una porción equivalente a una comida para gatos (una o dos tazas). La forma no es tan importante, excepto que los cuencos con lados rectos tienen menos probabilidades de volcarse y ensuciar.
Utilice un tapete
En la actualidad, muchos platos de comida para gatos de “diseño” vienen con “manteles individuales” a juego. Estos tapetes sirven para sujetar el plato, así como para atrapar cualquier goteo que pueda derramarse . Puedes hacer tu propio mantel individual usando materiales desechables, como cartón de cajas o restos de alfombras. Los manteles individuales de plástico “humanos” económicos también son buenos. Se pueden limpiar y los derrames de líquidos no los traspasan.
Alimentadores automáticos
Todos hemos tenido alguna vez una emergencia en la que tenemos que ausentarnos durante la noche o nuestro jefe nos pide que trabajemos hasta tarde. Dar de comer libremente no siempre es la solución, en especial si tenemos un gato con sobrepeso. Al rescate: comederos automáticos . Estos van desde comederos electrónicos costosos que se pueden programar para varios días hasta comederos simples que funcionan con baterías y se abren a la hora indicada.