Cómo cepillar los dientes de tu gato

Los gatos tienen dientes que necesitan cuidados, al igual que los nuestros, pero la mayoría de las personas no piensan en cepillar los dientes de su gato como lo hacen con los suyos. Masticar comida y juguetes proporciona cierto cuidado dental, pero muchas veces no es suficiente para ayudar a prevenir el desarrollo de problemas dentales. Saber cómo cepillar los dientes de su gato puede ayudar a prevenir estos problemas junto con el dolor innecesario.

¿Cuántos dientes tienen los gatos?

A los gatitos les crecerán 26 dientes de leche que luego se les caerán cuando les salgan los 30 dientes permanentes. Estos 30 dientes suelen estar en su lugar alrededor de los seis meses de edad y consisten en cuatro caninos, doce incisivos, diez premolares y cuatro molares. Los caninos y los incisivos pueden ser los dientes más visibles, ya que están en la parte delantera de la boca, pero los premolares y los molares son los que mastican por completo, por lo que son los dientes más importantes.

Suministros necesarios para cepillar los dientes de tu gato

Prepararse para cepillarle los dientes a tu gato hará que la tarea sea más sencilla. Algunos gatos necesitarán más paciencia o ayuda para quedarse quietos, mientras que a otros no parece importarles que les cepillen los dientes.

• Cepillo de dientes de dedo: se puede utilizar un cepillo de dientes de cabeza pequeña, un hisopo seco u otro elemento para cepillar los dientes de un gato. Los gatos tienen bocas pequeñas y dientes diminutos, por lo que un cepillo de dientes de tamaño normal suele ser demasiado grande para hacer lo que necesitas hacer.
• Pasta de dientes para mascotas: la pasta de dientes para personas no solo tiene ingredientes que pueden ser tóxicos para los gatos, sino que además sus sabores no suelen ser atractivos para el paladar felino. La pasta de dientes diseñada para gatos no solo será segura para que la ingiera un gato, sino que también puede ayudar a que el proceso sea más agradable si a tu gato le gusta su sabor.
• Golosinas : Las golosinas sabrosas como queso, atún, comida enlatada para gatos, camarones u otras opciones con olor son excelentes recompensas para un gato que no está acostumbrado o no disfruta que le cepillen los dientes.
• Ayuda calmante: los suplementos calmantes, los medicamentos para aliviar la ansiedad, los sedantes o las feromonas relajantes pueden ayudar a aliviar el miedo, el estrés y la ansiedad que sienten muchos gatos cuando llega el momento de cepillarse los dientes. Estos aditivos para su régimen de cepillado de dientes pueden eliminar la lucha que muchas personas experimentan cuando intentan contener a su gato.
• Toalla: se puede utilizar una manta o toalla para envolver a tu gato cuando llegue el momento de cepillarle los dientes. La técnica del burrito para gatos puede ayudar a que el gato se sienta tranquilo y seguro y también evita que sus patas golpeen el cepillo de dientes.

Consejos para cepillar los dientes de tu gato

Una vez que tengas todos los materiales que necesitas para cepillarle los dientes a tu gato, puedes limpiarle los dientes. Un amigo puede ser útil si tu gato es un poco inquieto, pero si tu gato se resiste y llora, debes dejar de intentar sujetarlo. En este caso, será necesario administrarle suplementos o medicamentos para calmarlo. Si tu gato no se resiste, envolverlo en una toalla sigue siendo útil para evitar arañazos accidentales y ayudar a proporcionarle un mecanismo de calma adicional. Ya no se recomienda sujetar a un gato del cogote, ya que esto en realidad aumenta su nivel de estrés.

Si tu gato está listo, ofrécele algunas golosinas y, mientras le sujetas la cabeza con suavidad, desliza el cepillo de dientes con pasta de dientes debajo de las encías y cepíllale los dientes. Una vez que hayas pasado el cepillo unas cuantas veces, ofrécele más golosinas y continúa cepillándolo si es necesario. Asegúrate de detenerte si tu gato comienza a forcejear o a llorar.

¿Qué pasa si no le cepillas los dientes a tu gato?

Al igual que ocurre con otros animales con dientes, si las bacterias y los restos de comida se acumulan en los dientes de un gato, pueden provocar una inflamación e infección en la boca. Si la infección es lo suficientemente grave, puede entrar en el torrente sanguíneo a través del suministro de sangre a las encías y afectar a los órganos internos del gato. El hígado, los riñones e incluso el corazón pueden verse afectados negativamente por dientes y encías enfermos.

Además del daño que las enfermedades dentales pueden causar en los órganos de un gato, los dientes en sí pueden enfermarse e infectarse tanto que se rompen, es necesario extraerlos o incluso se caen. Las enfermedades dentales son dolorosas, pueden causar problemas de salud graves, mal aliento, babeo y afectar permanentemente a un gato si no se tratan de manera oportuna. Con solo cepillar los dientes de su gato puede ayudar a prevenir que ocurran estos problemas.