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El plomo es una sustancia peligrosa que, si es ingerida por los perros, puede provocar diversas consecuencias graves, como anemia, trastornos gastrointestinales, letargo y anorexia, y cambios neurológicos o de conducta. Si bien es poco frecuente, la intoxicación por plomo puede tratarse si se diagnostica rápidamente y se controla con cuidado.
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¿Qué es el envenenamiento por plomo?
El plomo, una sustancia tóxica que se ha vuelto omnipresente en la pintura de las casas antiguas, es un metal con muchas propiedades. Si bien no se usa tan comúnmente en productos, a principios del siglo XX se agregaba a una variedad de productos para el hogar .
El plomo ingerido por vía oral es más peligroso para los perros, pero también puede absorberse al entrar en contacto con la piel o al inhalarlo. Los cachorros y los perros más jóvenes pueden ser propensos a investigar lamiendo y mordiendo objetos nuevos y pueden ser especialmente vulnerables al envenenamiento por plomo. Si se están realizando obras en una casa antigua, es posible que se hayan descubierto capas de pintura con plomo vieja y yeso con plomo. Los cachorros curiosos pueden dejarse llevar por su curiosidad y consumir plomo accidentalmente al masticar escombros cerca del lugar de la renovación. Si bien la pintura es la fuente más común y más conocida de envenenamiento por plomo, también se puede encontrar en juguetes, baterías, pelotas de golf, municiones, equipos de soldadura, plomos de pesca y esmaltes cerámicos.
Signos de envenenamiento por plomo
Los síntomas de envenenamiento por plomo pueden causar vómitos y diarrea repentinos, letargo y disminución del apetito. Estos signos pueden ser agudos o notarse más lentamente según el nivel de exposición. Los signos neurológicos incluyen caminar sin coordinación (ataxia), convulsiones, temblores y otros cambios repentinos de comportamiento como esconderse y agresividad.
Causas del envenenamiento por plomo
Lo más común es que un perro ingiera partículas de plomo al masticar o lamer un objeto de plomo. Las mascotas que corretean en antiguas obras de construcción también podrían estar expuestas al plomo e ingerir partículas de plomo al acicalarse posteriormente. Cuando el plomo entra en el cuerpo, se absorbe principalmente por el tracto gastrointestinal. La acidez del estómago altera el plomo y aumenta aún más su absorción.
Diagnóstico de envenenamiento por plomo
Si sospecha que su mascota ha consumido un elemento que contiene plomo, lleve a su perro a la sala de urgencias veterinaria más cercana. La atención médica y la hospitalización que su mascota necesitaría se brindarían en un centro de atención las 24 horas. Ir a un hospital de urgencias sería la forma más rápida de asegurarse de que su mascota reciba tratamiento.
La parte más importante para ayudar a su veterinario a determinar por qué su mascota se comporta como si estuviera enferma es proporcionarle un historial detallado y la cantidad de productos con plomo a los que estuvo expuesta o ingirió su mascota. Mencionar si ha realizado renovaciones recientes en el hogar puede ser un detalle fundamental para ayudar a determinar si su mascota estuvo expuesta al plomo. Informar a su veterinario si sospecha que su perro ingirió sustancias que contienen plomo y la cantidad también será importante. El veterinario comenzará con un examen físico y lo combinará con el historial proporcionado. Es posible que recomiende radiografías, análisis de sangre y análisis de orina. Un aspecto positivo del plomo es que, al ser un metal, se puede visualizar en rayos X si una mascota consumió un objeto sólido como un plomo de pesca.
El tratamiento varía según la cantidad ingerida y los signos de enfermedad que presente su mascota. En el caso de algunas mascotas que puedan presentar signos que pongan en peligro su vida, como convulsiones, el veterinario intentará estabilizarlas lo máximo posible. En otros casos más estables, su veterinario puede determinar si es posible eliminar la fuente de plomo, ya sea haciendo que la mascota vomite, realizando una endoscopia o una cirugía, si es necesario. Incluso si se elimina el objeto de plomo, su mascota seguirá necesitando cuidados paliativos que normalmente incluirían líquidos, medicamentos contra las náuseas y los vómitos, y relajantes musculares o medicamentos anticonvulsivos, si está indicado. Los medicamentos quelantes y algunos antiácidos pueden ayudar a fijar el metal en el cuerpo para que la toxicidad no aumente. Estos medicamentos se utilizan normalmente en un entorno de hospital veterinario de urgencias y deben utilizarse con mucho cuidado. El veterinario puede solicitar pruebas de laboratorio específicas que analicen el nivel de concentración de plomo en sangre, pero estas pruebas normalmente no se realizan en el hospital y deben enviarse a un laboratorio externo.
Una mención de honor para aclarar los peligros del plomo se extiende a los perros que comen animales salvajes a los que se les ha disparado con perdigones de escopeta. Si tienes un perro activo que deambula por lugares donde han estado los cazadores, ten siempre cuidado si tu cachorro empieza a morder un cadáver recién encontrado. La ingestión de esos perdigones de escopeta también puede provocar envenenamiento en una mascota.
En definitiva, la mejor manera de abordar una emergencia por envenenamiento por plomo es ser proactivo y saber con qué materiales puede entrar en contacto su cachorro. No solo es más seguro para todas las mascotas, sino que, dado que el plomo es una toxina tan conocida, los dueños de mascotas deben estar al tanto de lo que puede haber dentro de su propia casa.