En 2003, los peces fluorescentes, creados a partir de danios cebra , se unieron a las filas de los peces de acuario alterados o artificiales. Al igual que los peces híbridos pintados, teñidos y artificiales que los precedieron, rápidamente se volvieron populares entre los consumidores ávidos de algo nuevo y diferente. Los colores brillantes de los peces fluorescentes los convirtieron en superventas instantáneos. Si bien en realidad no brillan en la oscuridad, sus colores brillantes fluorescen bajo la luz azul y los hacen bastante coloridos, al igual que los peces de arrecife de agua salada.
Ahora, además de los danios cebra ( Danio rerio ), existen barbos tigre ( Puntigrus tetrazona ) y tetras ( Gymnocorymbus ternetzi) que han sido modificados genéticamente para portar los genes de colores brillantes. El Consejo de Agricultura de Taiwán reveló que también ha producido con éxito cíclidos convictos transgénicos ( Amatitlania nigrofasciata ) y peces ángel ( Pterophyllum scalare ).
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Cómo empezó
Todo empezó de forma bastante inocente cuando un profesor de la Universidad Nacional de Taiwán extrajo una proteína fluorescente de una medusa y la insertó en el genoma de un huevo de pez cebra. Esperaba que los órganos del pez cebra fueran más fáciles de ver cuando los estudiara, pero para su sorpresa, todo el pez comenzó a brillar bajo una luz azul.
Más tarde, presentó una diapositiva de su pez luminoso en una conferencia, donde captó el interés de una empresa productora de peces tropicales. Al ver su valor en el mercado minorista de peces tropicales, aceptaron financiar los experimentos del profesor a cambio del uso de sus técnicas. El uso de proteínas de medusas de diferentes colores permitió producir nuevos colores. El resto, como dicen, es historia.
El pez luminoso, bautizado por su creador como TK-1, se empezó a vender en el mercado asiático y, a finales de 2003, las ventas se habían extendido a Estados Unidos. No todo el mundo estaba a favor de comercializar el pez y se está debatiendo mucho sobre la ética y la seguridad de comercializar peces genéticamente modificados. Pero se está desarrollando una nueva especie de pez luminoso y de colores y la demanda de este pez por parte de los acuaristas está creciendo.
Prohibición de venta
La FDA ha declarado que los peces modificados genéticamente no suponen una amenaza mayor para el medio ambiente que los peces no modificados y, por lo tanto, no justifican una regulación. California no estaba dispuesta a dejar pasar el asunto y rápidamente decidió bloquear las ventas de peces luminosos. Las regulaciones se levantaron en 2015 debido a que la Administración de Alimentos y Medicamentos y el Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor de Florida determinaron que los peces no representaban ningún riesgo ambiental. Los peces luminosos ahora son legales en California para su importación y venta comercial. Canadá, Australia y Europa también habían prohibido originalmente los peces, pero ahora están disponibles para la venta.
Los principales argumentos en contra de los peces son cuestiones ambientales y éticas. Se temía que si se liberaban peces genéticamente modificados en los cursos de agua locales, estos pudieran dañar el medio ambiente o que los animales los consumieran y sufrieran efectos secundarios. Muchos creen que vender peces genéticamente modificados no sólo es éticamente incorrecto, sino que envía un mensaje equivocado a los niños . Otros creen que cualquier alteración de un ser vivo es un abuso del poder que tenemos sobre la vida y lo consideran nada menos que contaminación biológica. Y otros expresan su preocupación por el hecho de que, si los peces que brillan se vuelven populares, ¿qué será lo próximo: gatos y perros que brillen en la oscuridad? ¿Dónde se trazará el límite?
Proponentes
Mientras tanto, los defensores de este pez afirman que es completamente seguro y que es una alternativa atractiva a los peces de agua salada, que son coloridos pero más caros y difíciles de cuidar. Citan informes que muestran que si los peces luminosos se encontraran en aguas naturales, no podrían sobrevivir. Los colores brillantes de los peces luminosos los convertirán en presas fáciles en la naturaleza si llegan a meterse en vías fluviales naturales.
La otra ventaja de los peces fluorescentes sobre otras formas de peces de colores es que el pez fluorescente se crea en el huevo y los peces que nacen se reproducen de forma natural y transmiten el color fluorescente a sus crías. Los peces teñidos, pintados, inyectados o coloreados artificialmente que a veces se encuentran en las tiendas de peces en realidad sufren daños en el proceso de coloración, los colores no son permanentes y se desvanecen gradualmente, y los colores no se transmiten a las crías.