¿Pueden los perros comer miel?

La miel, rica en azúcares naturales y en ciertas vitaminas y minerales que se cree que aportan una serie de propiedades medicinales, se utiliza con frecuencia como complemento de salud tanto para personas como para mascotas debido a sus propiedades antimicrobianas y antifúngicas, que se dice que reducen la inflamación y combaten las bacterias, tratan todo tipo de afecciones, desde úlceras de estómago y dolores de garganta, e incluso ayudan a minimizar las alergias. Pero, ¿pueden nuestros amigos de cuatro patas aprovechar los beneficios de la miel?

¿Pueden los perros comer miel?

La buena noticia es que la miel es segura para los perros, pero solo en pequeñas cantidades. Cuando elijas miel para ofrecerle a tu perro, opta por la cruda siempre que sea posible, ya que estará en su forma más pura y no ha sido pasteurizada, calentada ni procesada. La miel altamente pasteurizada tiene menos beneficios para la salud (su consistencia generalmente parecerá más acuosa y de color transparente, y a menudo se encuentra en botellas de plástico con forma de oso).

Peligros de la miel para los perros

Si bien la miel cruda es segura para los perros adultos, no se debe ofrecer a cachorros, perros con sistemas inmunológicos comprometidos o perros diabéticos u obesos. La miel cruda puede contener la presencia de esporas de botulismo; el botulismo es una enfermedad poco común pero grave que puede causar parálisis en los perros. Los perros mayores (y los humanos) tienen sistemas inmunológicos lo suficientemente fuertes como para tolerar la exposición a las esporas de botulismo.

A muchos perros les encanta su dulce sabor, pero, por supuesto, el alto contenido de azúcar de la miel puede provocar obesidad y otros problemas relacionados con el peso. Al igual que ofrecer demasiados dulces a los niños, permitir que los perros consuman grandes cantidades de miel también puede provocar caries , por lo que siempre es una buena idea cepillar los dientes (con una pasta de dientes específica para perros)
después de consumir miel .

¿Cuánta miel puede consumir mi perro?

Aunque la miel no es tóxica para los perros y contiene algunos nutrientes y vitaminas esenciales, no se les debe ofrecer a los perros más de una cucharadita de miel al día. Si bien muchos alimentos “humanos” son difíciles de digerir para nuestras mascotas, la miel ya está predigerida por las abejas, por lo que en la mayoría de los casos es agradable para el estómago de su perro. Por ese motivo, la miel es un ingrediente común en las golosinas caseras para perros, ya que es una forma natural y sabrosa de endulzar galletas especiales para su cachorro.

Al igual que con cualquier alimento “humano”, asegúrese de hablar sobre la posibilidad de ofrecerle miel a su perro con su veterinario, quien podrá brindarle pautas de alimentación más específicas según la raza y el historial médico de su perro. Si su perro consume demasiada miel por accidente, esté atento a los síntomas de malestar estomacal, como diarrea y vómitos, y avise a su veterinario de inmediato.

Beneficios de la miel para los perros

Se cree que la miel actúa como un remedio natural para todo, desde la inflamación hasta las alergias, ya que es rica en vitaminas B y C y contiene nutrientes como granos de polen, azúcares naturales, enzimas, minerales, magnesio, cloruro de sodio, potasio, hierro, azufre y fosfato. La miel también contiene proteínas y hormonas.

Se dice que la miel puede ayudar a reducir (o incluso curar) las alergias estacionales en humanos y perros. Como la miel cruda ya contiene trazas de polen, comerla puede ayudar a que tu perro desarrolle tolerancia al aire polinizado del exterior. Si tu perro ya ha tenido una reacción alérgica a una picadura de abeja, nunca es buena idea ofrecerle miel, ya que puede provocar úlceras bucales, lesiones cutáneas y otras reacciones alérgicas.

Además, así como los humanos suelen utilizar miel para aliviar el dolor de garganta, se puede ofrecer una pequeña cantidad a tu perro para ayudar a minimizar la inflamación y aliviar los síntomas de afecciones como la tos de las perreras (solo asegúrate de consultar primero con tu veterinario). También puede ayudar a prevenir las bacterias malas en el tracto digestivo de tu perro.

Ofrecer pequeñas cantidades de miel también puede ayudar a mejorar el nivel de energía de su mascota, ya que la miel cruda contiene azúcares naturales que se descomponen fácilmente y proporcionan un rápido impulso de energía.

La miel también contiene propiedades hidratantes, por lo que es un ingrediente común en varios productos de belleza y, de la misma manera, puede mejorar el pelaje y la piel de tu perro. Se puede utilizar en champús para ayudar a nutrir la piel de tu mascota y curar infecciones mientras mantiene a raya a los insectos.

Considerada como el tipo de miel más beneficioso para los humanos (y sus queridas mascotas), la miel de manuka contiene la mayor cantidad de propiedades medicinales. La miel de manuka proviene de Nueva Zelanda y se elabora a partir del arbusto medicinal Manuka. Su contenido nutricional es hasta cuatro veces mayor que las formas normales de miel de flores, así como significativamente más enzimas que otros tipos de miel. Estas enzimas producen un peróxido de hidrógeno natural, que puede servir como agente antibacteriano; algunos dueños de mascotas aplican miel a un corte o herida para ayudar a protegerlo de contaminantes externos, promover una curación más rápida e incluso ayudar a matar bacterias.