Cómo hacer que un gato vomite

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Los gatos a veces comen cosas que no deberían. Además de los productos químicos domésticos, los alimentos comunes, las plantas de interior e incluso el contenido de tu costurero podrían ser algo que tu gato intente comer en algún momento. Si bien algunos alimentos para humanos y plantas de interior son seguros para que los gatos los mordisqueen, muchos pueden ser tóxicos . Saber cómo hacer que tu gato vomite lo que comió, así como cuándo no hacerlo, puede ser una táctica clave en los primeros auxilios caseros.
Métodos en casa
úlcera estomacal grave y potencialmente mortal.
Otras fuentes pueden recomendar darle a tu gato una solución de agua salada. Sin embargo, esto tiene sus inconvenientes. Dar una gran cantidad de sal de una sola vez puede ser tóxico por sí solo. Además, la disfunción renal es una enfermedad común en gatos, especialmente en los mayores. Además, algunos productos tóxicos, como las plantas de lirio, el anticongelante y los AINE (como el ibuprofeno o la aspirina), pueden causar insuficiencia renal aguda. Parte de la función de los riñones es filtrar la sal del torrente sanguíneo de tu gato, por lo que añadir agua salada puede agravar un problema subyacente.
Advertencia
No intente provocar el vómito de su gato en casa sin instrucciones específicas de su veterinario. Métodos como el peróxido de hidrógeno y la sal pueden causar complicaciones graves. Si cree que su gato ha ingerido algo peligroso, contacte inmediatamente con su veterinario o con el centro veterinario más cercano.
Métodos veterinarios
Sin duda, la forma más segura de provocar el vómito en tu gato es que lo haga tu veterinario. Existen medicamentos inyectables que tu veterinario puede administrarle para inducir el vómito, como la dexmedetomidina, la hidromorfona y la xilazina. Cabe destacar que este es un medicamento diferente al que tu veterinario le administrará a tu perro para inducir el vómito.
Idealmente, su gato debería empezar a vomitar a los pocos minutos de recibir la inyección, pero los gatos no son tan constantes como los perros en cuanto a vomitar en la consulta veterinaria. Solo entre el 60 % y el 75 % de los gatos vomitan con medicación. Una vez que esté claro que su gato no puede vomitar nada más, existen otros medicamentos que su veterinario puede recetar para aliviar las náuseas causadas por la hidromorfona o la sedación causada por la xilazina o la dexmedetomidina. Sin embargo, los veterinarios tienden a inducir el vómito con mucha menos frecuencia en gatos que en perros, así que pregúnteles si tienen este medicamento en el hospital en caso de emergencia para que pueda planificar con antelación.
Cuándo no inducir el vómito
Si sospecha que su gato ha ingerido algo indebido, provocarle el vómito podría causarle más daño que beneficio. Hay ciertos casos en los que no se recomienda hacerlo. Si han pasado más de dos o tres horas desde que sospecha que su gato ha ingerido una toxina, provocarle el vómito tiene menos probabilidades de éxito, ya que el objeto podría haber sido absorbido o haber superado el estómago.
Si su gato ha ingerido materiales cáusticos, como lejía, limpiador de desagües o productos a base de petróleo, no debe hacerlo vomitar. Al hacerlo, podría causar quemaduras químicas en el esófago de su gato e incluso podría hacer que su gato inhale (o aspire) los materiales cáusticos. Si sospecha que su gato tiene una aguja o hilo de coser , tampoco quiere hacerlo vomitar. La aguja podría perforar el esófago o la boca al volver a subir. El hilo de coser tiene la desagradable costumbre de atascarse parcialmente en los intestinos de un gato, permitiendo que el resto del hilo corte el resto de los intestinos. Si sospecha que su gato comió hilo, hacerlo vomitar podría causar que el hilo corte el esófago de su gato.
Hay otros momentos en los que no debes inducir el vómito en tu gato:
- Ya vomitando
- Débil o inconsciente
- Antecedentes de convulsiones u otras afecciones neurológicas
- Condiciones cardíacas actuales
- Cirugía abdominal reciente
Advertencia
A los gatos con hocicos más cortos (como los persas) tampoco se les debe inducir el vómito, ya que existe un mayor riesgo de aspiración (inhalación) del contenido estomacal. Si su gato aspira el vómito, puede contraer una neumonía por aspiración.
En general, los perros son los principales responsables de ingerir toxinas y cosas que no deberían, pero eso no significa que los gatos no se metan en problemas. Si sospecha que su gato ha ingerido algo que puede hacerle daño, contacte con su veterinario de inmediato. Él le aconsejará sobre los pasos a seguir y, si es la mejor opción, podrá inducir el vómito de su gato de forma segura.