La rotura del ligamento cruzado es un problema ortopédico doloroso que puede hacer que tu perro empiece a cojear de repente sobre una de sus patas traseras . Aunque existen muchas razones diferentes para la cojera en los perros , la rotura del ligamento cruzado es una de las más comunes. La rotura del ligamento cruzado es una lesión dolorosa e inmovilizadora . Aunque no pone en peligro la vida , debe tratarse.
Tabla de contenidos
¿Qué es una lesión del ligamento cruzado?
La lesión del ligamento cruzado es un problema en la articulación de la rodilla del perro. Los ligamentos conectan el fémur (hueso del muslo) con la tibia (hueso de la espinilla). Esto estabiliza la articulación de la rodilla. El ligamento puede romperse completamente (desgarro cruzado completo) o parcialmente (desgarro cruzado parcial). El desgarro completo también se denomina desgarro del ligamento cruzado anterior (LCA) o del ligamento cruzado posterior (LCC).
Síntomas de una lesión del ligamento cruzado en perros
Cuando el ligamento cruzado se desgarra, la tibia se mueve libremente por debajo del fémur, lo que provoca dolor y cojera. Este tipo de lesión tiene un síntoma principal:
Cojera y renguera
La cojera repentina en una pata trasera suele ser el primer signo de una lesión. La cojera puede empeorar con la actividad y mejorar con el descanso. Si una lesión no se trata, se producen rápidamente cambios artríticos . Esto provoca cojera crónica y malestar. Si su perro muestra repentinamente signos de dolor o cojera, llévelo al veterinario lo antes posible.
Causas de una lesión del ligamento cruzado
Las dos causas principales de la rotura del ligamento cruzado en los perros son la degeneración del ligamento y el traumatismo. Además, algunas razas o tipos de perros están predispuestos a sufrir lesiones del ligamento cruzado, entre ellos los rottweilers , los labradores retrievers , los terranovas y los staffordshire terriers .
- Degeneración: Los perros con sobrepeso u obesidad son más propensos a este tipo de lesiones, ya que soportan más peso y son propensos a la degeneración de ligamentos.
- Traumatismo: un desgarro puede ser consecuencia de una lesión deportiva en un perro sano . Esto podría incluso significar un aterrizaje “incorrecto” al correr o saltar.
Diagnóstico de la lesión del ligamento cruzado en perros
Su veterinario podrá diagnosticar una lesión del ligamento cruzado con un examen físico. El veterinario también palpará la rodilla de la pata que está coja. Si hay alguna otra duda sobre el diagnóstico, el médico tomará una radiografía. Si su perro tiene una lesión del ligamento cruzado, hable con su veterinario para que lo derive a un cirujano veterinario certificado . Allí, podrá analizar la mejor opción para su perro y su estilo de vida.
Tratamiento
Aunque el descanso y la medicación pueden ayudar, generalmente se recomienda cirugía para reparar el ligamento cruzado roto. Existen varios enfoques quirúrgicos diferentes, cada uno con sus ventajas y desventajas.
Cirugía de ligamentos cruzados: reparación extracapsular
En este método, se coloca una sutura fuerte para asegurar el fémur y la tibia, reemplazando esencialmente la función del ligamento cruzado desgarrado. La sutura sostiene la articulación de la rodilla mientras se acumula tejido cicatricial y se fortalecen los músculos que rodean la rodilla. La sutura invariablemente se afloja o se rompe en algún momento en el futuro. Debe permanecer intacta durante ocho a doce semanas para que se produzca la curación.
Se trata de un procedimiento relativamente rápido y sencillo con buenas tasas de éxito, especialmente en el caso de perros pequeños. Es menos costoso que otros métodos. El éxito a largo plazo varía y puede ser mejor en el caso de perros pequeños.
Cirugía de ligamentos cruzados: TPLO
Otra opción quirúrgica es la osteotomía de nivelación del platillo tibial (TPLO). Se trata de un procedimiento más complejo que el método extracapsular y requiere de equipo quirúrgico y entrenamiento específicos.
La TPLO altera la biomecánica de la articulación de la rodilla, lo que le permite funcionar correctamente sin un ligamento cruzado. Se realiza un corte completo en la parte superior de la tibia (meseta tibial). Se gira la meseta tibial para cambiar el ángulo de esta parte del hueso. Se fija una placa de metal para reparar el hueso cortado. La tibia se cura en varios meses.
Se puede observar una mejoría parcial en cuestión de días; sin embargo, la recuperación total llevará varios meses, por lo que el reposo en jaula es esencial. En general, el pronóstico a largo plazo es bueno y la reaparición de una lesión es poco frecuente. No es necesario retirar la placa a menos que surjan problemas más adelante.
Como ocurre con cualquier cirugía, pueden surgir complicaciones, incluida una infección. La TPLO es significativamente más cara que la cirugía tradicional.
Cirugía de ligamentos cruzados: TTA
Un tercer método quirúrgico es el avance de la tuberosidad tibial (TTA). Los detalles de este método son ligeramente diferentes a los de una TPLO, pero el TTA implica cortar la tibia y colocar implantes metálicos.
Algunos cirujanos describen la TTA como un procedimiento menos invasivo que la TPLO. La TTA también puede tener una recuperación más rápida que la TPLO, aunque algunos cirujanos ven poca diferencia. La anatomía y el estilo de vida del perro también son factores decisivos. El costo de la TTA es comparable al de la TPLO.
Pronóstico para perros con lesión del ligamento cruzado
En general, el pronóstico después de la cirugía es bueno, con una probabilidad del 85 al 90 por ciento de volver a los niveles normales de actividad. El tratamiento médico posoperatorio consta de varios pasos para la recuperación a largo plazo de su perro. Es útil saber que los perros más pequeños (que pesan menos de 25 a 30 libras) pueden evolucionar mejor que los perros más pesados. La terapia médica implica lo siguiente:
- Varias semanas de reposo en jaula
- Paseos breves y tranquilos con correa solo para ir al baño
- Ejercicios de sentarse y ponerse de pie
- Terapia en cinta de correr subacuática y/o natación
- Medicamentos antiinflamatorios orales y suplementos aprobados por veterinarios para apoyar la salud de las articulaciones
Si sigue las recomendaciones de su veterinario, su perro tendrá más posibilidades de recuperarse por completo y de sufrir menos complicaciones. Como ocurre con cualquier cirugía ortopédica, es habitual que los perros desarrollen artritis en el futuro. Con el cuidado adecuado, su perro podrá llevar una vida plena, saludable y cómoda.
Estos perros pueden desarrollar osteoartritis en la articulación de la rodilla afectada. Además, los perros afectados por esta lesión tienen entre un 40 y un 50 por ciento de probabilidades de sufrir un desgarro del ligamento de la otra rodilla.
Cómo prevenir una lesión del ligamento cruzado
Si bien no siempre se puede prevenir una rotura del ligamento cruzado, mantener al perro en un peso saludable y proporcionarle mucho ejercicio (pero no demasiado extenuante) puede minimizar el riesgo.