Los abscesos se forman como parte de la respuesta del cuerpo a una infección o irritación. Básicamente, son bolsas de pus que crecen alrededor de heridas, irritantes o áreas de tejido infectado. Algunos abscesos pueden pasar desapercibidos para el dueño de un gato hasta que se rompen y pierden líquido. Saber a qué prestar atención y cómo tratar los abscesos puede salvarle la vida a su gato. Si no se tratan, los abscesos pueden progresar a infecciones sistémicas potencialmente mortales.
Tabla de contenidos
¿Qué es un absceso?
Un absceso es una bolsa de pus, que es un líquido espeso lleno de células inflamatorias que reaccionan a organismos infecciosos (como bacterias) o irritantes. Un absceso se forma más comúnmente debido a una infección tisular. Los abscesos se pueden encontrar en todo el cuerpo (externa e internamente) y pueden variar mucho en tamaño.
Síntomas de abscesos en gatos
Los abscesos suelen aparecer como una hinchazón debajo de la piel, especialmente en zonas que se lesionan fácilmente en una pelea con otro gato, pero también pueden aparecer en la boca o dentro de la cavidad corporal.
Los abscesos se parecen mucho a un tumor, pero aparecen más repentinamente (a menudo, unos días después de la lesión) y son sensibles al tacto. Un absceso está lleno de líquido, por lo que se comprimirá si se toca y se sentirá algo blando o blando. Los abscesos a menudo se hinchan hasta el punto de que comienzan a supurar pus y/o sangre de la herida de entrada (una perforación de un diente o una garra, por ejemplo). El líquido suele tener mal olor y puede tener un aspecto de color tostado a sanguinolento.
Si se forma un absceso en el interior de la boca debido a una infección en los dientes o las encías, el gato puede tener un mal aliento notable, negarse a comer y volverse letárgico. Los abscesos en el interior del cuerpo también pueden causar letargo y disminución del apetito. Las infecciones sistémicas causadas por abscesos no tratados pueden hacer que el gato se sienta enfermo y presente fiebre.
Causas de los abscesos
Los tipos más comunes de abscesos en los gatos son los que se producen en la boca y debajo de la piel, pero pueden aparecer en cualquier lugar donde las bacterias se infiltren en el tejido. Entre los culpables bacterianos más comunes se encuentran E. coli, ciertas especies de Streptococcus , Pseudomonas, Mycoplasma, Pasteurella multocida , Corynebacterium , Actinomyces , Nocardia, Bacteroides, Clostridium y Fusobacterium.
Estas bacterias a menudo se introducen a través de heridas, lesiones o caries que se producen en diversas zonas del cuerpo, entre ellas:
- Abscesos dentales: estos abscesos se encuentran en la raíz de los dientes enfermos o dañados. Cuando las bacterias se acumulan en la superficie de un diente, las encías se inflaman e infectan y se pueden formar abscesos debajo de la línea de las encías. Si las bacterias migran al conducto radicular de un diente roto o enfermo, se puede formar un absceso en este tejido más profundo. Los abscesos dentales son comunes en los gatos, pero son difíciles de notar hasta que aparecen signos definitivos como aliento horrible, rechazo a la comida o saliva con sangre.
- Abscesos por mordedura: para que un gato desarrolle un absceso por mordedura, debe ser mordido por otro animal. Por eso, los abscesos por mordedura son más comunes en los gatos que pasan tiempo al aire libre. Cuando un gato es mordido, las bacterias de la boca del otro animal ingresan a la herida y se puede formar una infección. Estos abscesos se ven debajo de la piel de los gatos como bultos y, por lo general, el dueño del gato no los nota hasta que se rompen y comienzan a supurar pus. Estos abscesos pueden sentirse calientes al tacto y causar inflamación de la piel.
- Abscesos internos: invisibles desde el exterior del cuerpo del gato, los abscesos internos se producen en los órganos internos debido a inflamaciones, enfermedades y objetos extraños. Son mucho menos comunes que las heridas por mordeduras y los abscesos dentales.
Diagnóstico de abscesos en gatos
Si su veterinario sospecha que hay un absceso en la piel debido a una mordedura u otra lesión y el absceso no se ha roto, entonces se puede realizar una aspiración con aguja fina (AAF) para ver qué hay dentro. Si se trata de un absceso, su veterinario podrá extraer pus con la jeringa.
Si se sospecha que hay un absceso dental, un veterinario examinará la boca del gato para detectar si hay pus, pero será necesario aplicar anestesia y realizar radiografías para inspeccionar la boca a fondo. Los abscesos se verán en las radiografías y será necesario tratarlos quirúrgicamente mientras el gato está bajo anestesia.
Si se sospecha que hay un absceso interno, la ecografía ayudará al veterinario a diagnosticarlo, pero es posible que se necesite cirugía para abordar el absceso.
En ocasiones, se realizan cultivos bacterianos para diagnosticar el tipo específico de bacteria que causa el absceso. Esto ayudará al veterinario a determinar el tratamiento antibiótico adecuado.
Cómo tratar los abscesos en los gatos
La apertura o extirpación quirúrgica del absceso y el mantenimiento del drenaje del pus son los principales tratamientos para la mayoría de los abscesos. A menudo, se necesitan antibióticos además del drenaje para eliminar la infección. Es posible que sea necesario realizar extracciones dentales en caso de abscesos en la raíz del diente (junto con una limpieza dental exhaustiva).
Pronóstico para gatos con abscesos
Con un tratamiento rápido y agresivo, los abscesos suelen ser fáciles de tratar y sanan rápidamente. Las infecciones que se han propagado a las articulaciones, los huesos o el torrente sanguíneo tienen un mayor riesgo de causar daños a largo plazo o la muerte, pero estos casos son poco frecuentes en gatos bien cuidados.
Cómo prevenir los abscesos
Mantener a los gatos dentro de casa ayudará a prevenir la formación de abscesos por luchar contra las heridas. Las limpiezas dentales periódicas y un buen cuidado bucal ayudarán a prevenir la formación de abscesos dentales. Algunos gatos tienen más problemas que otros con las enfermedades dentales, pero mantener sus dientes limpios puede ayudar a prevenir los abscesos.