En un principio, un episodio de asma felino puede considerarse una bola de pelo más o un trozo de comida que se ha ido por el “cañón equivocado”. Sin embargo, es probable que los episodios recurrentes de tos llamen la atención del propietario. En sus primeras etapas, el asma puede hacer que un gato tosa y luego parezca estar bien , pero es una afección progresiva que requiere tratamiento . Un veterinario debe examinar a
un gato que tosa para diagnosticar el problema y garantizar un tratamiento adecuado.
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¿Qué es el asma?
Al igual que el asma humano, el asma felino es una afección respiratoria provocada por alérgenos que provoca dificultad para respirar . El sistema inmunológico de algunos gatos reacciona de forma exagerada a un alérgeno inhalado. La reacción inmunitaria resultante provoca una producción excesiva de sustancias en el torrente sanguíneo que causan una inflamación intensa en las vías respiratorias.
Síntomas del asma en los gatos
Los primeros síntomas del asma pueden ser difíciles de detectar y los ataques graves pueden no ocurrir con frecuencia, por lo que es fácil atribuirlos a bolas de pelo. Los síntomas tienden a volverse más frecuentes y más notorios con el tiempo.
Un síntoma que diferencia el asma felina de las bolas de pelo u otras obstrucciones físicas es el sonido de un leve silbido cuando el gato respira, que puede ser más audible después de un juego vigoroso o de correr.
Las vías respiratorias hinchadas e inflamadas secretan un exceso de mucosidad y luego se contraen, lo que dificulta la respiración del gato. Como resultado de la disminución de la ingesta de oxígeno, el gato se cansará rápidamente.
Durante un ataque de asma grave, el gato tiende a encorvarse hasta el suelo con el cuello y la cabeza extendidos para ayudar a despejar las vías respiratorias de mucosidad. El gato puede tener arcadas, estornudar, toser o incluso vomitar. El gato puede o no expulsar mucosidad espumosa.
Los ataques de asma pueden ser mortales y un gato que sufra un ataque grave debe ser llevado al veterinario de inmediato. Incluso un gato que presente uno o dos de los primeros síntomas debe ser examinado. Una vez diagnosticado, hay cosas que puede hacer para ayudar a su gato durante uno de estos ataques.
Causas del asma
Muchos de los mismos alérgenos responsables de los ataques de asma humanos también pueden desencadenar ataques de asma felinos, entre ellos:
- Humo de cigarro
- Moho o hongos
- Productos químicos para el hogar
- Polvo
- Polen
- Partículas de arena para gatos
El estrés puede provocar o exacerbar un ataque de asma felino. Por ello, siempre debes intentar mantener la mayor calma posible cuando tu gato sufra un ataque.
Diagnóstico del asma en los gatos
Su veterinario utilizará varias pruebas diagnósticas para diagnosticar el asma en su gato. Las herramientas de diagnóstico más comunes incluyen:
- Análisis de sangre: una variedad de análisis de sangre ayudarán a su veterinario a evaluar la salud general de su gato, descartar otras enfermedades e identificar la presencia de inflamación en el cuerpo de su gato.
- Radiografía de tórax: también llamada radiografía torácica, este diagnóstico ayudará a su veterinario a visualizar cualquier anomalía dentro de los pulmones, como áreas de inflamación crónica o acumulación inusual de líquido. A veces, los gatos con asma tendrán patrones de ramificación brillantes en sus radiografías. Esto es indicativo de una acumulación de células inflamatorias dentro de las vías respiratorias.
- Lavado broncoalveolar (BAL): este procedimiento se realiza insertando un tubo endotraqueal en la tráquea del gato bajo anestesia general. Esto le permite al veterinario tomar directamente una muestra de los fluidos presentes en las vías respiratorias de su gato. Además del asma, el BAL puede diagnosticar otras afecciones de los pulmones. La desventaja del BAL es que requiere anestesia general, que no se recomienda para un gato que sufre una enfermedad o dificultad respiratoria grave.
Tratamiento
Las estrategias de tratamiento básicas y más comunes para el asma felino incluyen un esteroide para ayudar a reducir la inflamación en las vías respiratorias y un broncodilatador para mantener las vías respiratorias abiertas para que el gato pueda respirar más fácilmente.
A veces, estos medicamentos se administran por vía oral, pero otra forma de administración es con un inhalador de dosis medida, como Flovent, que se administra a través de una máscara especial. La cámara de aerosol para felinos Aerokat se desarrolló para este propósito. La ventaja de la administración de esteroides en aerosol sobre las píldoras y las inyecciones es que va directamente a los pulmones, en lugar de a todo el cuerpo, lo que genera menos efectos secundarios.
Si su gato tiene ataques más severos de lo que considera normal, visite a su veterinario para una reevaluación y un posible ajuste de los medicamentos.
Pronóstico para gatos con asma
El asma felina es una enfermedad crónica y progresiva que no tiene cura. Su veterinario trabajará para desarrollar un plan de administración continua de medicamentos para mantener a su gato lo más cómodo posible durante toda su vida.
Una vez que a su gato se le haya diagnosticado asma felina, existen varias opciones para realizar cambios en el estilo de vida que pueden ayudar a reducir los ataques de asma recurrentes, según la gravedad del caso. Lo primero y más obvio que deberá hacer es tratar de eliminar los alérgenos ambientales que están causando dificultad respiratoria en su gato.
Al igual que con la mayoría de los problemas de salud felinos, la clave para el manejo exitoso del asma felino es conocer bien a su gato, mantener los ojos y los oídos abiertos a los cambios en la respiración, administrar los medicamentos según lo prescrito y obtener atención veterinaria cuando esté indicado, ya sean controles de rutina o intervención de emergencia.
Cómo prevenir el asma
Un gato puede desarrollar asma si vive en un entorno con alérgenos que hacen que su sistema inmunológico reaccione de forma exagerada. Para reducir el riesgo de que su gato desarrolle asma, tome estas medidas preventivas:
- Reduzca el consumo de tabaco: si fuma, en el futuro deberá hacerlo al aire libre. Mejor aún, considere dejar de fumar, por su salud y por la de todas las criaturas que comparten su hogar.
- Elimina el moho y los hongos: realiza una limpieza profunda. Aunque pueda parecer contraindicado, un limpiador a vapor es un buen método para eliminar el moho y otros alérgenos de superficies sólidas, como pisos de baldosas, mamparas de ducha y paredes. Los servicios profesionales son los indicados para limpiar los conductos de aire acondicionado central.
- Reduzca el polvo y los ácaros: pasar la aspiradora con frecuencia puede ayudar a reducir el polvo y los ácaros. Aunque son caros, los purificadores de aire HEPA son excelentes para eliminar tanto los ácaros del polvo como las esporas de moho del aire. Considere la posibilidad de instalar un purificador de ambientes en la habitación que su gato ocupa con más frecuencia. Un purificador HEPA también ayudará durante la temporada de polen.
- Edite los productos químicos domésticos: utilice productos de limpieza respetuosos con el medio ambiente para el beneficio de sus gatos, su salud y el entorno de su hogar. Lo ideal es abstenerse de utilizar ambientadores y popurrís, detergentes perfumados para la ropa y perfumes que pueden provocar problemas respiratorios en gatos sensibles.
- Cambie la arena para gatos: debido al polvo que se levanta de las arenas de arcilla, la mayoría de ellas no son buenas para los gatos asmáticos. arena para gatos a base de madera o papel sin fragancia añadida. Recuerde que los gatos suelen ser quisquillosos con los cambios de arena, así que introduzca la nueva arena gradualmente.