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Todos los dueños de gatos conocen la eterna lucha entre el gato y el puntero láser. Para ser algo tan pequeño y sin olor, ese pequeño punto rojo puede mantener a los gatos ocupados, a pesar de (o quizás debido a) el hecho de que nunca pueden atraparlo. Sin embargo, curiosamente, existe cierto debate sobre si los punteros láser son o no un gran juguete para nuestros amigos felinos. Entonces, ¿por qué los gatos persiguen los láseres? ¿Es hora de deshacerse del láser en favor de un tipo diferente de juguete?
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El atractivo del láser
Los láseres estimulan a los gatos por naturaleza debido a lo que representan: una presa que se mueve rápidamente. El hecho de que tu gato no tenga que esforzarse mucho para conseguir comida (a menos que cuentes todo el esfuerzo que le supone maullar toda la mañana hasta que le llenas el cuenco) no significa que no esté programado para ello.
Cuando el punto de un láser se desplaza por la habitación, tu gato lo interpreta como un animal pequeño que intenta correr y esconderse. Por ello, aparecen ciertos comportamientos felinos inherentes , en particular el deseo innato de cazar, abalanzarse y matar a la presa en cuestión. El hecho de que sea simplemente una proyección no importa mucho porque tu gato está actuando con piloto automático, no con intelecto.
Cómo ven los gatos los láseres
Hay otro factor que también influye cuando tu gato persigue un láser: el hecho de que simplemente parezca atractivo. Para entender por qué, es útil tener una comprensión básica de cómo funcionan los ojos de tu gato y en qué se diferencian de los ojos humanos.
La retina es una de las estructuras principales del ojo. Está compuesta por dos tipos de células clave: bastones y conos. Los bastones se encargan de la visión en condiciones de poca luz y de detectar el movimiento, mientras que los conos ayudan al ojo a ver los colores. Los ojos humanos tienen más conos que bastones, lo que significa que vemos el mundo con mucha vitalidad. Los gatos, por otro lado, tienen más bastones que conos, lo que los convierte en expertos en captar incluso el más leve de los movimientos.
¿Qué tiene que ver esto con los láseres? Significa que son bastante difíciles de ignorar. En el momento en que apuntas un láser a tu gato, lo captará en su visión periférica y, si aún no se ha dado cuenta de que no puede comerse ese punto rojo (o si sabe que no puede pero no le importa), eso es todo lo que necesitará para iniciar su ciclo depredador.
El debate sobre los gatos y los láseres
Puede resultar sorprendente saber que existe cierta controversia sobre si es buena idea tentar a tu gato con láseres, pero el debate sobre los gatos y los láseres existe desde hace algún tiempo.
El principal problema que señalan los entusiastas de los gatos que están en contra del láser es que hacer que tu gato persiga un láser es una forma de burla. Recuerda, tu gato está acechando y abalanzándose sobre ese punto rojo porque su cerebro le está diciendo que atrape la comida y la mate. El gato no lo está haciendo claramente como una forma de juego, aunque se esté divirtiendo.
El láser es un objetivo inalcanzable y, por muy buenas que sean las habilidades de caza de tu gato, nunca podrá comérselo y nunca terminará su ciclo depredador. Muchos gatos descubren la artimaña y dejan de interactuar con el láser. Otros lo encuentran inmensamente frustrante y pueden empezar a comportarse mal como resultado. Los gatos frustrados se comportan de maneras poco ideales, como volviéndose destructivos o agresivos. Si notas una conexión entre jugar con tu gato y un láser y un mal comportamiento, probablemente sea el momento de guardar el puntero para siempre.
Para que los punteros láser sean más un juego que una provocación, dale a tu gato una golosina o un juguete físico justo cuando termines de jugar. De esa manera, obtendrá la satisfacción de una “matanza”, incluso si no es del láser en sí.
Consejos de seguridad para el uso del puntero láser
Si parece que a tu gato le gusta perseguir un láser y no se queda atrapado en un bucle interminable de caza, salto y decepción, probablemente no haya nada de qué preocuparse. Perseguir un láser es una forma fantástica de que tu gato haga algo de ejercicio físico y mental, y también le permite poner en marcha sus instintos felinos por un rato, algo que los gatos de interior no pueden hacer tan a menudo como les gustaría.
Por supuesto, debes asegurarte de seguir los consejos de seguridad adecuados para evitar dañar a tu gato mientras juega. Aquí hay dos consejos importantes que debes tener en cuenta.
No apuntes la luz directamente a los ojos de tu gato. Incluso los láseres de juguete emiten una luz increíblemente brillante, por lo que no debes apuntarle directamente a tu gato (¡ni a ti mismo!). Si lo haces, podrías causarle problemas de visión y/o lesiones oculares.
Ofrécele a tu gato muchos otros juguetes. Si el láser es el único medio de escape de juego de tu gato, es más probable que empiece a sentirse frustrado. Asegúrate de que tenga acceso a muchos otros objetos con los que cazar y jugar, incluidos juguetes con hierba gatera y varitas.