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Son crujientes, nutritivos y refrescantes en ensaladas, sopas y batidos, pero ¿es seguro que nuestros perros coman pepinos como snack? Aunque a menudo se los confunde con verduras, los pepinos son en realidad una fruta, forman parte de la misma familia que incluye melones y calabazas, y están repletos de fibra, agua y otros nutrientes. Pueden ser un bocadillo saludable e hidratante tanto para humanos como para sus contrapartes caninas.
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¿Pueden los perros comer pepinos?
Aunque hay algunas frutas y verduras que los dueños de mascotas deberían evitar, como las uvas y las cebollas , por ejemplo, el pepino recibe el visto bueno de la mayoría de los veterinarios. Son una alternativa saludable a las golosinas para perros convencionales porque tienen pocas calorías, mucha fibra y un crujido satisfactorio que encanta a muchos perros.
Solo hay alrededor de ocho calorías por media taza de rodajas de pepino, y cuando se compara con el promedio de una golosina para perros mediana que ronda las 40 calorías, es fácil ver por qué es mejor optar por pepinos en lugar de golosinas envasadas comercialmente.
Beneficios de los pepinos para los perros
Además de ser bajos en sodio y grasas, los pepinos también tienen un alto contenido de agua (se considera que están compuestos por hasta un 95 por ciento de agua). Esto significa que son una opción especialmente buena para los perros con sobrepeso , así como para cualquier perro que pueda beneficiarse de un premio refrescante e hidratante después de una larga caminata o un paseo en el jardín en un día de verano. Algunos veterinarios sugieren cambiar los premios por verduras como los pepinos como una forma de ayudar a tu perro a controlar su peso sin tener que eliminar las recompensas por un buen comportamiento.
Los pepinos también están repletos de nutrientes y minerales beneficiosos tanto para los perros como para los humanos, como las vitaminas B, C y K, cobre, potasio, fósforo y magnesio.
Se ha demostrado en estudios realizados con animales que comer pepinos ayuda a controlar los niveles altos de azúcar en sangre e incluso reduce la inflamación. También están repletos de fibra y contienen betacaroteno y manganeso. Es cierto que tendrías que dejar que tu perro comiera muchos pepinos para obtener beneficios significativos, pero incluso los bocados pequeños pueden tener sus ventajas.
Peligros de los pepinos para los perros
Por supuesto, aunque se consideren “seguros” para nuestros perros, existen algunos peligros potenciales que debes tener en cuenta antes de dejar que Fido se coma un pepino entero. En primer lugar, si tu perro tiene antecedentes de cálculos en la vejiga u otros problemas urinarios, consulta con tu veterinario antes de usar pepinos. Debido a que los pepinos tienen un alto contenido de vitaminas D y C, pueden causar un problema en perros que ya están predispuestos a desarrollar cálculos.
Si bien consumir demasiado pepino probablemente no le cause daños graves a tu perro en la mayoría de los casos, al igual que con cualquier alimento para humanos, siempre existe el riesgo de que sufra molestias gastrointestinales. Cada perro procesa la “comida para humanos” de manera diferente, por lo que siempre debes asegurarte de controlar a tu mascota para detectar cualquier efecto secundario negativo después de comer rodajas de pepino con moderación.
También es importante cortar los pepinos a un tamaño manejable y tener en cuenta la raza del perro para evitar que se atragante. No es de extrañar que los perros más pequeños necesiten trozos más pequeños. La cantidad de pepino que puede tolerar un golden retriever, por ejemplo, no será la misma que la adecuada para un shih tzu.
Cómo servirle pepino a tu perro
Si tu perro es de los que se zampa una golosina especial en cuestión de segundos, definitivamente debes asegurarte de no darle rodajas gigantes de pepino que se le pueden quedar atascadas en la garganta (o incluso causar obstrucciones intestinales potencialmente mortales). Sobre todo, nunca le ofrezcas a tu perro un pepino entero, ya que el riesgo de atragantamiento o problemas digestivos es demasiado alto.
Al preparar pepino para perros, se puede utilizar crudo o cocido. Sin embargo, si le preocupan los pesticidas o la piel fibrosa exterior, que puede resultar difícil de digerir, lo mejor es pelarlo primero.
Al igual que con cualquier fruta o verdura, asegúrese de lavar bien el pepino antes de dárselo a su perro, ya sea en trozos pequeños del tamaño de un bocado o picado y mezclado con las croquetas o la comida húmeda habituales de su perro.
También está bien dejar que los perros coman la piel y las semillas, aunque también se pueden sacar con una cuchara antes de dejar que el perro las coma.
Aunque técnicamente pueden pertenecer a la categoría de pepinos, los encurtidos son definitivamente un no-no para tu perro. Están llenos de sodio y de especias añadidas como ajo y conservantes, por lo que definitivamente no son recomendables para perros.